Hola ! Hoy vamos a profundizar en un tema que parece reservado a los grandes financieros, pero que está al alcance de todos si nos tomamos el tiempo de comprenderlo: la formación de empresas mediante holdings y el uso de LBO (Leverged Buy-Out). ¿Has oído hablar alguna vez de estas estrategias que parecen sacadas directamente de una película de Wall Street? Bueno, eso es exactamente de lo que vamos a hablar.
La LBO: una herramienta de financiación inteligente
La LBO, o compra apalancada, es simple: se compra una empresa utilizando más deuda que capital. Esto le permite adquirir una gran empresa con relativamente poco dinero propio. Las principales palancas utilizadas aquí son financieras, fiscales y legales.
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Apalancamiento financiero : digamos que quieres comprar una empresa por valor de 10 millones de euros. En lugar de sacar todo ese dinero de tu bolsillo, utilizas dinero del banco. Lo inteligente es que la empresa adquirida generará ingresos, y esos ingresos ayudarán a pagar la deuda.
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Apalancamiento fiscal : ¿Los intereses que paga por esta deuda? Puedes deducirlos de los impuestos de la empresa. Esto reduce los impuestos que la empresa tiene que pagar, lo que mejora su flujo de caja.
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Apalancamiento legal : Montas una estructura en la que, aunque solo inviertas una pequeña parte del capital, controlas toda la empresa.
El arte de apilar participaciones
¿Por qué complicarse con varios holdings? Cada nivel de sujeción que crees multiplica los efectos de las palancas. Cuantas más capas haya, menos capital personal necesitarás invertir.
Tomemos un ejemplo concreto:
- Quieres comprar una empresa por 10M€.
- Con un único holding, si el banco te presta el 50%, todavía te quedan 5M€ para salir.
- Encuentras inversores, pero sigues siendo mayoría y todavía tienes que invertir 2,6 millones de euros.
- Demasiado ? Si añadimos un holding más, sólo tendremos que encontrar 1,3 millones de euros.
- Otra participación y estás en 0,2 millones de euros.
Al final, para una empresa de 10M€, sólo habrás invertido de tu bolsillo 0,2M€. Los bancos prestan el resto, los inversores aportan el capital y tú controlas todo.
Construyendo un imperio con migajas
¿La verdadera cosa mágica? Una vez que la empresa adquirida comienza a generar ganancias, esos ingresos pueden reembolsar a los bancos y, eventualmente, recomprar las acciones de otros inversores. Terminas siendo el rey de tu propio imperio, ya sea en el lujo, los medios o la industria.
Las sociedades holding y las LBO pueden parecer intimidantes, pero con el conocimiento adecuado y un poco de audacia, son accesibles para quienes estén dispuestos a sumergirse en el mundo de las finanzas corporativas. Es una manera de hacer grandes cosas con medios relativamente limitados, utilizando inteligentemente el apalancamiento.
Entonces, ¿listo para construir tu imperio?
